Granada afronta el nuevo curso con 590 parados más y una caída de 2.403 afiliados a la Seguridad Social

Conclusiones

        El final del verano se ha dejado notar en el mercado de trabajo: Granada suma 590 desempleados y pierde 2.403 afiliados a la Seguridad Social.  

        Agosto ha interrumpido cuatro meses consecutivos de descensos del paro. El fin de la temporada alta, de las contrataciones estivales y la merma de actividad en determinados sectores ha supuesto un incremento del 0,78% del desempleo, hasta los 75.971 parados.

 

 

       Por sectores, han contribuido al incremento del desempleo los servicios, con 509 parados más, hasta los 50.245; la construcción, con 197 desempleados más, hasta los 7.617; y la industria, con 35 personas en paro más, hasta las 3.584. La agricultura rompe la tendencia y saca del desempleo a 109 personas, dejando la cifra total en 6.196 desempleados.

        Granada ha registrado un peor comportamiento laboral que Andalucía (+0,42% de desempleo), pero mejora los resultados nacionales, donde el paro ha aumentado un 0,93%.

        Los peores resultados corresponden a los de la afiliación. En agosto se han destruido en la provincia 2.403 puestos de trabajo, reduciendo el número total de afiliados a la Seguridad Social un 0,67%, hasta los 353.808.

        En este caso, el comportamiento de Granada también ha sido peor que el del Andalucía, que ha registrado un descenso de la afiliación menor, del 0,52%, pero mejor que el del territorio nacional, donde la afiliación ha caído un 0,89%.

 

Valoración

        La Confederación Granadina de Empresarios (CGE) lamenta que Granada afronte el nuevo curso con unos datos que constatan la desaceleración de la actividad económica y el enfriamiento del mercado de trabajo. “En agosto ya no hablamos de ralentización, sino de un frenazo laboral en toda regla: ha aumentado el paro y hemos registrado una considerable cifra de destrucción de empleo”, explica la secretaria general de la CGE, María Vera.

       “Llevamos desde mayo advirtiendo de que la evolución de las cifras del paro y de la afiliación estaban moderándose, dejándonos peor preparados para el final de la temporada alta turística. Los datos de agosto lo confirman, hemos sufrido una considerable cifra de destrucción de empleo”, apunta Vera, que señala que en los meses de junio, julio y agosto la afiliación se ha reducido en 5.147 personas. “Más allá del comportamiento laboral de agosto, que tal y como demuestra la serie histórica suele ser negativo, lo que nos preocupa es la tendencia a la baja que dejan los datos en los últimos meses”.

        La secretaria general de la CGE recuerda, además, que el curso comienza con un “grado muy elevado de incertidumbre”, marcado no solo por la más que previsible ralentización de la economía, sino por un contexto político complicado que puede condicionar la actividad empresarial. “Lamentablemente, creemos que este va a ser un otoño difícil para la empresa y la economía. La inestabilidad política, la falta de seguridad jurídica, no benefician ni a las empresas ni al empleo”.