03-06-2025. Granada ha cerrado el mes de mayo con buenos indicadores laborales. Después de un abril muy positivo para el empleo, la provincia ha vuelto a registrar un descenso del paro y ha experimentado un incremento de la afiliación, confirmando que la ‘temporada alta’ laboral ya está plenamente instalada en Granada.
Las cifras de desempleo han caído en mayo un 1,38%, lo que supone que hay 956 personas menos en las listas del paro granadinas. El total de desempleados se ha reducido hasta los 68.334, la cifra más baja desde el año 2008.

Sin embargo, aunque se trata de un balance positivo, la caída registrada este mes de mayo es mucho menos intensa que la que experimentó la provincia tanto en abril (-3,62%) como en mayo del año pasado (-2,26%).
Por sectores, el mayor descenso del paro se ha registrado en los servicios, con 45.811 parados (-756). También cae el desempleo en la construcción (-187, hasta los 6.161) y lo hace testimonialmente en la industria (-22, hasta los 3.372) y en el colectivo sin empleo anterior (-13, hasta los 8.122 parados). Según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal, solo crece el paro en la agricultura, con 22 desempleados más que en abril, hasta alcanzar los 4.868.
Granada sale perdiendo de la comparación con el conjunto andaluz y español, donde las caídas del paro han sido bastante más intensas. En el caso de Andalucía, el desempleo ha disminuido un 2,14%; mientras que en España este porcentaje alcanza el 2,30%.
En cuanto a la afiliación, los datos también son positivos para Granada. La provincia ha creado 767 empleos en mayo, un 0,21% más. La cifra total de inscritos en la Seguridad Social crece, por tanto, hasta un nuevo máximo de 371.556 afiliados.
Este comportamiento también contrasta con el registrado en Andalucía y España, donde el empleo ha crecido un 0,61 y un 0,91%, respectivamente. Además, se trata del menos incremento de la afiliación registrado en el mes de mayo desde 2015.
Por sectores, los mayores incrementos se registran en construcción (+356 afiliados), actividades sanitarias (+272), actividades administrativas (+265) y administración pública (+200). Sin embargo, cae el empleo de forma significativa en agricultura (-434 afiliados), educación (-218) y actividades artísticas (-112).
La Confederación Granadina de Empresarios ha indicado que los datos laborales de mayo, que sobre el papel son muy positivos, también señalan algunos aspectos preocupantes de nuestro mercado laboral que obligan a valorarlos con cautela. “Hay dos aspectos que nos inquietan: por un lado, la clara ralentización tanto de la creación de empleo como del descenso del paro; y, por otro, el comportamiento de sectores clave para la economía de Granada, como la hostelería”, ha explicado el presidente de la Comisión de Asuntos Económicos de la CGE, Emilio Palomar.
Palomar ha apuntado que la evolución del empleo en mayo de 2015 ha sido peor que la del pasado mes abril y que la registrada en mayo del año pasado. “El hecho de que en abril subiera más la afiliación y el paro se redujera menos puede explicarse por un adelanto de la temporada alta, pero eso no sirve cuando miramos los datos del año pasado”, ha indicado, recordando que en mayo de 2024 el paro se redujo un 2,26% (frente al 1,38% de este año) y la afiliación subió un 0,26% (frente al 0,21% de 2025). “Es cierto que ha subido la afiliación, como suele ser habitual en mayo, pero nos encontramos ante el peor mes de mayo desde 2015”, ha manifestado el responsable de la Comisión de Asuntos Económicos.
En ese sentido, la CGE ha mostrado su preocupación por la evolución que ha registrado un sector clave como la hostelería, que en lugar de crear empleo ha reducido la afiliación en 21 personas. “Que en pleno mes de mayo la hostelería no crezca es alarmante”, ha indicado Emilio Palomar. “Sobre todo, porque desde 2011 el sector no registraba un mayo en negativo para el empleo”.
En estos resultados, y en la ralentización general que ha experimentado el mercado laboral en mayo, puede tener mucho que ver con la incertidumbre y la complicada situación que están soportando las empresas. “Nuestras empresas, particularmente las pymes, siguen trabajando en un escenario de altos costes laborales e impositivos, se enfrentan a una burocracia y una sobrerregulación que obstaculizan su actividad y afrontan una incertidumbre creciente con medidas como la reducción de jornada “, ha concluido Palomar.